Foto: Men’s Health
1.- EL CÍRCULO DE LA ANGUSTIA
Cuando tu cerebro percibe una posible amenaza–ya sea una sombra o una fecha de entrega que se aproxima– inunda tu sangre con adrenalina y cortisol, preparando a tu cuerpo para pelear o huir. Tu primer curso de acción es usar este flujo hormonal para su fin original: correr 20 minutos reducirá el exceso de adrenalina y disminuirá la tensión en los músculos.
2.- REACCIONES POR REFLEJO
Conforme se incrementa tu carga laboral y tu lista de pendientes se alarga, los nervios pueden reducir tu apetito debido a que el estrés dispara la producción de la hormona supresora del apetito CRH. Sin embargo, con el tiempo la mayoría descubre que los niveles de cortisol elevados hacen justamente lo contrario. “La gente come para reducir la ansiedad”, explica el psicólogo Frank Bond. Cuando las cosas se pongan más difíciles en la oficina, elimina los antojos con almendras, ya que su alta dosis de magnesio reduce el estrés.
3.-LA MENTE CUENTA
La mente se ofusca conforme el estrés desajusta la corteza prefrontal haciendo que te cueste más trabajo formar pensamientos racionales. Si no te es fácil meditar, engaña a tu cerebro para que olvide la amenaza que percibe. “Puedes entrenar tu atención como si fuera un músculo”, explica Bond. “Simplemente, el concentrarte en la letra de tu canción favorita es una medida poderosa para alejar a la mente de preocupaciones”. No te angusties por nada.
4.- PRIMERA RESPUESTA
Recuerda: en términos evolutivos, una llamada de tu jefe en horario fuera de la oficina es el equivalente en 2017 a un tigre dientes de sable, y la respuesta a esa amenaza seguirá hasta que tu cerebro sienta que ya pasó el peligro. No obstante, una investigación de la Harvard Medical School demostró que los hombres que regularmente aplican técnicas de mindfulness (concienciación) pueden experimentar reacciones intrínsecas más positivas ante situaciones tensas en sólo ocho semanas. Tampoco sería mala idea desactivar las notificaciones en tu celular.
5.- RESPIRA CON FACILIDAD
Si las palabras “presentación ante la junta” provocan que sientas presión en el pecho, esa es la adrenalina que indica a tu corazón que eleve la presión sanguínea para preparar a los músculos ante un enfrentamiento. Para calmar tu ritmo cardiaco “concéntrate en la respiración –cada inhalación, cada exhalación– durante un minuto, aproximadamente cada dos horas”, sugiere Bond, quien ha ayudado a atletas profesionales a relajarse antes de un evento deportivo importante. Estarás como si nada.
FUENTE: lapatilla.com
26/Mar/2018