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La multimillonaria que se esfumó sin dejar rastro


De ser una multimillonaria socialité a desvanecer sin dejar rastro

© Copyright ¡HOLA! Revista ¡HOLA!

Esta socialité pasó de ser una de las mujeres más poderosas de Asia a esfumarse de la vista de todos. Incluso su familia más cercana desconoce cuál es su paradero. Su nombre es Gulnara Karimova y es la hija del exlíder uzbeko, Islam Karimov.

La diseñadora tenía una fortuna en 619 millones de dólares, lo que le permitía darse una vida muy glamurosa. Incluso muchos pensaron que podría ser la sucesora de su padre.

Ella se convirtió en toda una influencer y a menudo era vista en los eventos más importantes del mencionado país, donde siempre era el centro de atención. Sin embargo, de un día para otro desapareció.

En 2011 estuvo involucrada en un escándalo luego de que organizaciones en pro de los derechos humanos la denunciara por abusos.

Esto provocó que fuera declarada persona non grata por la Fashion Week de Nueva York ante la presión de dichas organizaciones, ya que esa no era la imagen que querían proyectar del evento.

Desde entonces, poco a poco fue desapareciendo de los focos y su imagen se fue desvaneciendo de los medios de comunicación. Desde 2014, se dejaron de tener noticias de ella.

Sin embargo, en agosto del año pasado, las autoridades de Uzbekistán informaron que la empresaria cumplía una condena luego de hacer sido detenida y juzgada.

Se le acusaba de fraude y de pertenecer a un grupo del crimen organizado que operaba en 12 países. Pero la realidad es que no se sabe dónde se encuentra, ni siquiera sus familiares más cercanos lo saben.

Su padre murió en 2016 y ella no se presentó al entierro. Tampoco ha visitado el enorme mausoleo que se levantó en su honor. Mientras tanto su hijo Islam, quien desde hace años residen en Reino Unido, no cree la explicación que han dado las autoridades y ha llegado a señalar que podría estar muerta.

En una entrevista concedida a la BBC, Islam declaró: “No entiendo cómo en pleno siglo XXI, nadie puede responder a una cuestión tan simple: ¿dónde está mi madre?”.

FUENTE: msn.com

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