Lady Gaga se propone matrimonio a sí misma

Este viernes las redes sociales se inundaban de eternas promesas y empalagosos mensajes de amor que demostraban lo que ya sabíamos de años anteriores: la gente se pone muy intensa en San Valentín —sobre todo si tienen conexión a internet—. Así, los resignados solteros del mundo que mantenemos este estatus de forma voluntaria nos refugiábamos en la sombra y abríamos la tarrina de helado más grande que encontrábamos en el congelador. Hasta que aparecía Lady Gaga para salvarnos el día y marcarse el discurso de la jornada, unas palabras que bien merecen enmarcarse.

La cantante compartía con sus millones de fans una instantánea de la misma portando un anillazo perteneciente a la firma Klarna. Un modelo de alhaja XXL que, literalmente, le ocupaba todo el dedo corazón, dedo que se usa precisamente para reivindicar a golpe de peineta, ¿coincidencia? No lo creemos. Este es el mensaje que acompañaba a la foto:

“¿Sabéis que hay una antigua tradición que afirma que solo el 29 de febrero de cada año bisiesto se les permite a las mujeres pedir matrimonio a los hombres? ¡Es 2020 y cualquier persona de cualquier persona con su identidad de género puede pedir matrimonio a quien quiera y cuando quiera!”

Y así, sin más, Stefani Joanne Angelina Germanotta —sí, este es su nombre real—, se pedía matrimonio a sí misma a través de unas declaraciones a la prensa:

“En un acto que desafía a esta antigua tradición, he decidido darme el anillo a mí misma. Uso este anillo hoy con orgullo para recordar tanto al resto como a mí misma que el único permiso que necesitan para amar proviene de dentro de vosotros mismos ”.

Sin duda el mejor y más inspirador de los mensajes para quienes tenemos pensado pasar esta jornada arropados hasta arriba viendo Netflix. Pero sin esa joya pendiendo de nuestro dedo, claro está, anillo que por cierto vale 1.142 €, ¿interesados? Este es el enlace de compra. ¡Feliz San Valentín Día del Amor libre!

Por cierto, si te has quedado con ganas de ver más ‘pedruscos’, estos son los anillos de pedida más despampanantes de las ‘celebrities’.

Fuente: Cosmopolitan