El médico responsable de la muerte de Matthew Perry, condenado a 30 meses en prisión
- Maritza Valencia
- hace 14 minutos
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El nombre de Matthew Perry volvió a la escena pública, esta vez desde los tribunales. El actor, famoso por interpretar a Chandler Bing en Friends, murió en octubre de 2023 tras una sobredosis, y ahora uno de los responsables directos de alimentar su adicción recibió una condena formal.
Se trata de Salvador Plasencia, conocido como el “Doctor P.”, un médico que operaba una clínica en las afueras de Los Ángeles y que se aprovechó de los problemas de adicción del intérprete para ganar dinero suministrándole ketamina de forma ilegal.
¿Qué pasó con Matthew Perry y su médico?
Según la investigación, Plasencia formaba parte de una red de narcotraficantes y médicos que vio en la dependencia de Perry una oportunidad para enriquecerse. El actor llegó a pagar hasta 55.000 dólares en efectivo por frascos de ketamina, muy por encima del costo real del fármaco.
Matthew Perry, de 54 años, fue encontrado sin vida flotando boca abajo en el jacuzzi de su casa en Los Ángeles. La autopsia determinó que tenía en el organismo una cantidad de ketamina similar a la que se usa en una anestesia general, lo que resultó fatal en su condición de salud.
Su lucha con las drogas venía de años atrás. En sus memorias, el actor relató que su adicción comenzó tras un accidente en moto acuática a finales de los noventa, cuando le recetaron analgésicos fuertes. Llegó a consumir decenas de pastillas diarias, con cambios drásticos en su peso y múltiples intentos de rehabilitación.
Lo que dicen las autoridades y el alcance del caso
Salvador Plasencia se declaró culpable de cuatro cargos de distribución ilegal de ketamina. Para evitar un juicio que podía costarle décadas de prisión, aceptó su responsabilidad y escuchó la sentencia:
30 meses (dos años y medio) de cárcel en una prisión federal.
Una multa de 5.600 dólares.
Las autoridades describieron su conducta como una traición al juramento médico, al aprovecharse de la vulnerabilidad de un paciente conocido, con historial de adicciones, para hacer negocio en lugar de ofrecer ayuda real.
El caso no se limita solo a Plasencia. En total, cinco personas fueron acusadas en conexión con la muerte de Matthew Perry:
Jasveen Sangha, apodada “la reina de la ketamina”.
Eric Fleming, quien reconoció haber distribuido la droga que terminó matando al actor.
Kenneth Iwamasa, señalado por ayudar a conseguir ketamina ilegal para Perry.
Mark Chavez, otro médico que aceptó declararse culpable de conspirar para distribuir el anestésico.
Y el propio Salvador Plasencia, ya sentenciado.
Las autoridades han descrito cómo Perry, desesperado por tratar su ansiedad y depresión, terminó acudiendo tanto a traficantes callejeros como a médicos sin escrúpulos. Compró hasta 20 frascos de ketamina por esos 55.000 dólares, pagando hasta 2.000 dólares por dosis que podían conseguirse por una cantidad mínima al por mayor.
(GA)
Fuente: TcTelevision.com

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