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El esperado estreno de House of Gucci llegó con la admiración por Lady Gaga, quien nuevamente se perfila a ser reconocida en las grandes premiaciones del séptimo arte como lo hizo hace un par de años con A Star Is Born. Esta vez, la también cantante tuvo que hacer un cambio muy significativo en su actuación, esta ocasión no interpretaba a alguien dedicada a la música como en el papel que le ganó el Oscar, sino que tuvo que meterse en la piel de un personaje muy complejo.
No solamente el acento que Patrizia Reggiani tenía que ser alcanzado a la perfección, sino que tenía que meterse a la psicología de un personaje bastante complicado. Patrizia fue la esposa del heredero de la firma Gucci y en un inesperado giro tras su divorcio, se determinó que era la mente maestra detrás del escalofriante asesinato del empresario del mundo de la moda. Como si eso no fuera suficientemente difícil, Gaga cargaba con otra preocupación en mente…la posibilidad de encontrarse con Patrizia, quien ha salido ya de prisión.
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FUENTE: Msn.com