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Mientras el director de Parasite, Bong Joon Ho, presentaba en la Berlinale su comedia sobre la carrera espacial Mickey 17, su estrella, el actor británico Robert Pattinson, se convertía en la sensación de grandes y pequeños medios.
Uno de ellos, Pero Like, cuya especialidad es congregar a latinos a probar comida de todo el mundo, llegó a Pattinson (Harry Potter, Twilight, The Batman) con una misión: preguntarle cuáles eran sus platillos latinoamericanos favoritos.
“Cebiche” fue la primera respuesta del también modelo. “Me gusta el cebiche. En realidad, amo el cebiche”. Y luego se tomó unos segundos para recordar el nombre de su bebida preferida. “Horchata. Me gusta la horchata”.
No fue el único consultado. Su coestelar Mark Ruffalo mencionó el mole, los tacos de cabrito en el mercado de Oaxaca.
Pattinson, la figura de la Berlinale
Mickey 17 es una comedia satírica sobre la carrera espacial y las ambiciones de multimillonarios, como Elon Musk.
La esperada producción se presentó hoy fuera de competencia durante el festival de Berlín, tras su estreno mundial el jueves en Londres. Llegará a las salas de cine el 5 de marzo.
“Es una historia que transcurre en el futuro, pero también podría suceder en el presente o el pasado”, declaró Bong Joon Ho.
La película está protagonizada por Robert Pattinson en el papel de Mickey, un joven sin dinero.
Para huir de sus problemas en la Tierra, acaba siendo conejillo de Indias en una nave espacial para colonizar otra galaxia.
Un multimillonario que evoca el estilo de Elon Musk, brillantemente interpretado por Mark Ruffalo (Avengers), también viaja en la expedición.
En la conferencia de prensa, Bong dijo que no tuvo ninguna inspiración particular en mente para este personaje, pero las alusiones a los gurús estadounidenses de la tecnología y al trumpismo son claras.
Mickey, contratado como un pasajero “prescindible”, está en lo más bajo de la escala social de la nave. Por ello, es enviado a todas las misiones y experimentos peligrosos, pero gracias a una máquina puede ser “reimpreso” y resucitar cada vez que muere.
Bong afirma que desconfía de las películas de “propaganda” y dijo que quiso hacer algo espectacular y divertido.
“Todo lo que le pasa a Mickey, su situación y la forma en que lo tratan en la película son políticos. Habla de la manera en que tratamos y respetamos a un ser humano”, comentó.
“Es una película de ciencia ficción donde la gente viaja a planetas extraterrestres con una nave espacial, pero son personas ridículas. No es una gran aventura espacial donde la gente se dispara con láseres. Se trata de perdedores ridículos. La película está llena de gente que es adorablemente ridícula”, destacó Bong. (E)
Fuente: El Universo
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